Reseña: Puro (Covenant #2) de Jennifer L. Armentrout

"Está la necesidad. Y luego está el Destino. Estar destinada a convertirse en un enchufe sobrenatural no es precisamente algo genial, especialmente cuando la “otra mitad” de Alexandria la sigue allá donde va. Y que, además, Seth aparezca en su sala de entrenamiento, al salir de las clases y también en la puerta —o ventana— de su dormitorio, definitivamente no es nada genial. Aunque su conexión tiene algunos beneficios, como alejar las pesadillas que envuelven lo ocurrido con su madre, no tiene efecto alguno sobre los sentimientos prohibidos que tiene Álex por el puro Aiden. Ni sobre qué va a hacer —y sacrificar— él por ella. Cuando los daimons se infiltran en los Covenants y atacan a los estudiantes, los dioses envían a las furias, diosas menores con la función de erradicar cualquier amenaza para los Covenants y el resto de los dioses, incluyendo al Apollyon y a Álex. Y si eso y las hordas de monstruos chupadores de éter no fueran suficiente, una amenaza misteriosa parece dispuesta a hacer cualquier cosa por neutralizar a Seth, incluso si eso supone forzar a Álex a la servidumbre o matarla. Cuando se involucra a los dioses, algunas decisiones ya no tienen vuelta atrás.”

¡Hola, hola, hola! Después de do semanas sin aparecer y muriéndome de la vergüenza porque no he subido nada debido a que soy una vaga integral procastinadora natural, vengo hoy con lo prometido. Llevaba mucho tiempo queriendo hacer esta reseña y así seguir con el reto que me había impuesto de hacer TODAS las reseñas de la saga Covenant. Se supone que después de soltar toda la carga en el primer vuelo, esta será mucho más fácil… ya veremos porque, ¡hoy toca hablar de Puro, el segundo libro de la saga!

Junto con el primero, Puro es uno de mis títulos favoritos dentro de la saga Covenant. En esta parte continuamos siguiendo a Alex, esa centinela tan rebelde que nos presentaba Jennifer L. Armentrout en Mestiza (os dejo el enlace a la primera reseña por si andáis un poco perdidos) y que está lidiando con su nuevo papel en este mundo que deriva nada más y nada menos que de los antiguos dioses griegos.

De nuevo, me pasó lo mismo que con Mestiza. En dos días ya tenía el libro más que acabado y releído. Esta autora y su facilidad para enganchar al lector. Una vez quedas entre sus garras, ya es muy difícil soltarse, aunque hay algo que cambia en este libro y que me parece muy importante comentaros para los que estáis empezando con esta saga. No me equivoco si digo que Puro es el libro más… ¿sentimental? Y no me refiero al hecho de que el libro te vaya a hacer llorar (aunque hay algún punto en el que se te humedecen los ojos), pero no hay tanta acción. Tenemos muchas más reflexiones de la protagonista. Se trata de uno de los libros en los que más empatice con Alex, porque se encuentra en una transición enorme, en un momento de su vida muy confuso en el que no comprende exactamente qué está ocurriendo y yo no quería más que atravesar el libro y abrazarla. He leído bastantes reseñas en las que criticaban el libro precisamente por esto, porque no era en el que más acción había y lo veían vacío. Yo no opino del todo así. Es verdad que no soy muy objetiva porque Covenant es una de mis sagas favoritas, pero estaba tan enamorada del universo de Jennifer L. Armentrout, de los personajes y de la historia en general... que yo estaba encandilada con todos los hechos de Puro. 

Este libro asienta las tramas que introducía Mestiza, nos da una visión más detallada del mundo creado por Jennifer L. Armentrout ya que conoceremos cómo se gobierna y qué otros Covenants existen.También hay una perspectiva más profunda de los personajes, por ejemplo, este volumen permite al lector conocer muchísimo mejor a Seth, ese gran desconocido. El personaje adquiere una importancia abismal. Sobre todo, se puede apreciar una mayor evolución en cuanto a su relación con Alex, que aviso ahora, no es del todo romántica. Tienen una relación un poco más complicada y que merece la pena que descubráis por vuestra cuenta si queréis leerlos la saga Covenant.

En cuanto al romance... no voy a hablar mucho. Sólo quiero decir de nuevo que en esta saga está una de las historias de amor más bonitas que he tenido el privilegio de leer. Os dejo una imagen (por puro fangirleo) con una de las frases más célebres que Aiden le dedica a Alex en este libro.

Voy a continuar presentando al resto de personajes, que en cada libro van adquiriendo más importancia. Son muchos. Y están en casi todos los libros, así que vamos por partes. En la entrada de Mestiza ya presenté a los protagonistas y volveré a hablar de ellos en próximos libros, pero he creído más conveniente hablaros de otros que ya aparecían en el primero y que también son importantes en este libro.

Caleb Nicolo es el mejor amigo de Alex. Al igual que ella, también es mestizo, aunque se lo toma con mucha más tranquilidad. Me encanta. Lo encontré uno de los personajes más reales, me lo podía imaginar completamente, muy enérgico y gracioso. Un adolescente que quiere divertirse y que no deja de meterse con su mejor amiga, aunque Caleb también estaba en los malos momentos. Un gran apoyo para Alex que se gana el corazón de todos los lectores.

Lea Samos. Mestiza. Al contrario que Caleb, ella no se lleva nada bien con Alex. Más bien son enemigas reconocidas. No se pueden ni ver y tienen trifulcas cada vez que están en la misma sala. Una rivalidad que llevan desde muy pequeñas. Lo que podemos saber de Lea hasta este libro es que también le gusta salir después de clase y tiene relaciones con diversos mestizos. Es un poco arrogante, aunque todavía tiene mucho que enseñar.

Deacon St. Delphi, el hermano pequeño de Aiden que en más de una ocasión le da algún que otro dolor de cabeza. Deacon es un personaje que aunque lo quiere ocultar, está muy dolido y tiene algunos problemas de identidad que no sabe resolver muy bien, pero es un auténtico amor. Es muy liberal, un personaje muy divertido y que con cada aparición me alegraba la vida.

Poco puedo añadir. Puro no es sólo la continuación de Mestiza. Es un libro escrito con mucho sentimiento, emoción y cariño, justo lo que transmite al lector. Es verdad que no es el que más movimiento tiene pero creo que algunas tramas necesitan una buena evolución y desde luego, hasta este punto, me parece que Covenant cumple muy bien con este cometido. Siempre tiene que haber una excepción a la regla, y Puro demuestra que… ¡segundas partes a veces sí son buenas!

PD: Ya lo comenté en la entrada anterior, pero lo voy a hacer también en esta. Las imágenes que he utilizado las podéis encontrar en esta cuenta de Tumblr: Jladaily. También hay otras imágenes de novelas de Jennifer L. Armentrout. Pasad si queréis, son muy bonitas ♥